Arquitecto Sagrada Familia de Barcelona

Antoni Gaudí, el arquitecto de la sagrada familia de Barcelona, muestra todo su ingenio en una de las construcciones más hermosas y únicas que se puedes admirar en España. También conocido como el templo expiatorio de la sagrada familia, es una basílica católica ubicada en la ciudad de Barcelona, España, cuya construcción inició en 1882, y todavía sigue en proceso de terminar la obra. Es una de las infraestructuras más aclamadas del país europeo, así como visitado por un montón de turistas. Junto al Museo del Prado, es quizás la iglesia más visitada de todo el continente, dejando a un lado la influencia del Vaticano y la arquitectura romana.

En toda su infraestructura se puede apreciar cada una de las características arquitectónica del arquitecto de la sagrada familia de Barcelona, Gaudí. Este profesional trabajó gran parte de su trayectoria en él, especialmente en los últimos de su carrera, donde empeñaba tiempo en buscar las soluciones y mejorar la estética de la basílica. Con un estilo naturalista, logró la perfecta armonía entre los elementos ornamentales y los estructurales. Se puede apreciar la relación estrecha entre la visión y la estética, la función en que se quiere armar, y la forma en que se encuentra.

En pocas palabras, gracias al arquitecto de la sagrada familia se pudo lograr una integración de todos los artes conocidos en España para dar paso a la que es quizás la obra más grande de todo el continente. Con un estilo modernista, y catalogado como un bien cultural de interés nacional, Gaudí logró uno de los mejores diseños arquitectónicos de los últimos siglos.

A continuación destacaremos los detalles del arquitecto que hizo posible tal obra, como la infraestructura en sí. Si quieres saber más, ¡quédate con nosotros hasta el final!

¿Quién fue el arquitecto de la sagrada familia de Barcelona?

Antoni Gaudí, quien nación el 25 de junio de 1852, en Catalunya, fue la mente detrás de una de las obras más grande que España puede conocer. Desde que empezó la construcción de la obra, que aún se encuentra en construcción, se ve su influencia en cada una de las columnas y detalles. Desde pequeño se caracterizó por ser un niño enfermo, que no podía asistir a las clases y por tanto pasaba mucho tiempo en casa. En aquella casa de campo donde compartía con su familia fue donde captó la luz mediterránea y las imágenes de la naturaleza. Factor que sería determinante luego en su estilo arquitectónico.

Sus primeros pasos empezaron en el taller de su padre, donde aprendió los principios básicos y las virtudes del trabajo. Ahí es donde conocería la transformación de las superficies de acuerdo al volumen, lo que dispararía mucho su imaginación en un futuro. Finalmente logró cursar el bachillerato, pero luego se trasladó a Barcelona donde encontraría la pasión por la arquitectura. De hecho, fue ahí donde estudiaría, aunque se catalogó como un mal alumno. A pesar de sus malas notas, se la pasaba mirando fotografías de edificios, y frecuentaba a clases que desarrollaban su mente, como la filosofía y la poesía.

No sería hasta 1878 donde conocería a un importante empresario interesado en la visión artística de Gaudí. Con él como principal cliente, fue donde desarrolló grandes proyectos, como la finca Güel, Casa Güel, Bodegas Güel, y la iglesia de la colonia.

A sus 31 años, fue cuando Gaudí recibió el encargo de continuar el proyecto de la sagrada familia. Se trasladó de despacho, y pasaría ahí 43 años, hasta su muerte, dedicando sus energías para llevar a cabo este proyecto.

Impacto del arquitecto de la sagrada familia

A través de su arte, el cual era su estandarte, Gaudí impulsó el turismo en España, especialmente en Barcelona, una vez que dejó todas sus ideas en la sagrada familia. Existen otras grandes obras arquitectónicas, como La pedrana, pero no hay ningún otro que llame tanto visitantes como lo es la sagrada familia. Siendo sin duda la gran obra de Antoni Gaudí. Millones de personas vienen de todo el mundo solo para admirar las grandes columnas, el estilo arquitectónico, el estilo infundado por el maestro, la cultura detrás y mucho más.

De todas las obras que hizo, él sabía que esta era la que representaría un gran impacto cultural. En sus últimos años de carrera dejó atrás todas las demás para dedicarse completamente a la que creía que cambiaría al mundo. Sin duda es su obra más querida, la más grandiosa que destaca entre las demás y también la que la hizo ver la arquitectura de otra forma.

Como arquitecto, era un gran apasionado, pero también fue un gran creyente. Factor que quizás influyó de manera positiva para darle vida a cada una de sus creencias en lo que debía ser la sagrada familia. Lo fundó con profundo respeto y amor. Es quizás la razón por la que tardó tanto, y hasta su muerte, en el año 1926, solo hubiera construido la cripta y gran parte del templo.

Aunque no vivió para verla termina, sus ideas estaban vigentes, y el proyecto se encontraba concluido para solo hacer la obra. Los posteriores líderes ingenieros y arquitectónicos manejaron sus planos, maquetas y dioramas para que siguieran la obra tal como lo había proyectado el que es considerado el genio del modernismo en España.

Características de la sagrada familia

Quizás lo que más destaca de esta gran infraestructura es su ondulación en las fachadas. Tal característica recuerda a La pedrara, que se encuentra en Barcelona también. Para crear esta ondulación, Gaudí hizo un modelo de yeso con sus propias manos de manera que podía admirar cada detalle posible. Los canteros debían tomar las medidas necesarias para pasarla a las obras y realizar el cambio de escala correspondiente. Era todo un desafío, pero valía la pena de lo magnifico que era el proyecto. Las ondulaciones son una muestra de la visión de Gaudí, quien se apoyaba en la técnica de la geometría para conseguir la precisión matemática adecuada. Esto como un camino alternativo a la forma en que fue creada la sagrada familia, que es el sentimiento y la intuición de un gran genio.

Todo el monumento en general está pensado para partir de dos ejes que partían de la idea de su arquitecto. El primero era el significado cristiano, ya que Gaudí era un gran creyente. Y el segundo la observación de la naturaleza, un factor fundamental en el que había estado trabajando para pulir su estilo.

Por tanto, la infraestructura destaca por estos dos elementos. También se puede resaltar que el arquitecto de la sagrada familia de Barcelona acudió a los símbolos y alegoría s de la biblia para formar una relación estructural junto a la naturaleza.